Una guerra brillante: actuaciones comprometidas enriquecen esta batalla de gigantes históricos
En dónde la puedes ver: cines
Director: Alfonso Gomez- Rejon
Elenco: Benedict Cumberbatch, Michael Shannon, Nicholas Hoult, Tom Holland, Katherine Waterson, Tuppence Middleton, Matthew Mcfadyen.
País: Estados Unidos
Más información de la película: https://www.imdb.com/title/tt2140507/
La producción de Una guerra brillante, del director estadounidense Alfonso Gomez-Rejon, ha sido oscurecida por la caída de su productor, Harvey Weinstein. Después de sus escándalos sexuales, la película fue guardada por años y posteriormente vendida. Ahora, después de dos años de estar en el limbo ve la luz, y se agradece, pues el drama histórico está bien llevado, resultando en una película intrigante y discretamente moralista.
La película dramatiza la guerra de las corrientes eléctricas que se desarrolló entre los grandes inventores reales: Thomas Alba Edison (Benedict Cumberbatch) y George Westinghouse (Michael Shannon). También se menciona – aunque de manera breve – a Nikola Tesla (Nicholas Hoult), quien tiene un papel menor de lo que debería. Esta guerra, que duró buena parte de las décadas de 1880 y 1890, estuvo caracterizada por cuestionamientos de patentes, chismes, declaraciones públicas dolosas y colusiones económicas para deslegitimizar a la competencia. Hubo suficiente drama digno de telenovelas.
El elenco es una de las fortalezas de la película. Prácticamente, Shannon y Cumberbatch representan hoy lo mejor del entretenimiento, y aquí siguen con sus buenas interpretaciones. Shannon es elegante, controlado y caballeroso en la película. En el tráiler pareciera que su Westinghouse sería el bully de la cinta. No obstante, Shannon presenta un lado cauteloso, honorable y comprometido de su personaje. Westinghouse – más allá de ser el menos famoso de los tres titanes de la electricidad – resulta ser el ganador en cuanto a astucia y honor.
Cumberbatch parece haber encontrado su perfil ideal de personajes, el cual nos ha demostrado una y otra vez que domina – Sherlock Holmes, Doctor Strange, Alan Turing, Khan. Al igual que en las veces anteriores, aquí interpreta a un genio, complejo, con pésimas habilidades sociales, alejado de los demás por su destreza mental y por su poca paciencia. Su Alba Edison es la nueva adición al club. Dispuesto a ir a dónde nadie más va, Edison es alguien que vive para la gloria y la fama.
En este aspecto es donde los personajes de Westinghouse y Edison se alejan completamente. Mientras que el primero es el triunfador, el segundo se vuelve la persona más famosa de Estados Unidos. De hecho, la película también explora brevemente sus similitudes con la actual obsesión con la fama.
Asimismo, mientras que Edison hace hasta lo imposible por mantener la ventaja en la pelea de corrientes, incluso si eso implica mentir, engañar y humillar a los demás, Westinghouse mantiene la objetividad y serenidad digna de un “caballero”. La exploración de ambas personalidades es lo más complaciente de la cinta. Observar hasta dónde llegarán y cuáles serán sus límites son las características que los alejan y acercan a la audiencia.
En cuanto al elenco secundario, todos ofrecen buenas interpretaciones. Tom Holland y Nicholas Hoult están desaprovechados; aun así, hacen buen uso de su tiempo en pantalla. En especial me hubiera gustado ver más desarrollo en el personaje de Tesla. Pareciera que su historia es muy larga e intensa como para incluir lo suficiente en la película. Por último, Matthew Macfadyen como J.P. está perfecto, representando la frialdad empresarial bien conocida en nuestra realidad moderna.
En esta película de época no podrían faltar los personajes de esposas comprensivas. A pesar de usar personajes gastados que están al servicio de los hombres de la cinta, el papel de Marguerite Erskine Walker (Katherine Waterson), esposa de Waterhouse, y Mary Stilwell Edison (Tuppence Middleton), esposa de Edison, cumplen con su cometido. En la versión cinematográfica de los hechos, ambas tienen peso emocional y psicológico en sus esposos, funcionando como aliadas y cómplices, y no sólo como parejas. Ambas tienen diferente efecto en sus esposos: mientras que Erskine ofrece ambición, templanza y severidad profesional, el arco de Edison proporciona emoción, nostalgia y soledad.
Constantemente Gomez-Rejon utiliza movimientos de cámara, close-ups y efectos que dan dinamismo a la película. Pareciera una película de acción en ocasiones, aventando escenas poco convencionales que, en vez de distraer, resultan eficientes para lo presentado en pantalla.
Sorpresivamente la película no ha recibido buenas críticas entre la crítica internacional. No obstante, esto es una sorpresa, ya que resulta entretenida, ligera y bien actuada. De hecho, en diversas ocasiones recuerda a El gran truco, otra película de la época, subvalorada y con ¡Nikola Tesla! Parece ser que Una guerra brillante está destinada a convertirse en una de esas pequeñas joyas condenadas por los momentos tumultuosos de su producción.
Originaria de la Ciudad de México, Alessandra considera al cine como su gran amor. Fanática empedernida de Paul Newman y La Momia (1999), y dueña de una facilidad envidiable para aprenderse diálogos innecesarios para la vida real, en 2017 fundó Palomita de maíz. Aquí escribe constantemente sobre cine y televisión. También pueden encontrar sus palabras en sitios como InSession Film, Filmotomy, Cherry Picks y Screen Queens.