Rápidos y furiosos 9: un sutil ronroneo antes del rugido final
Dirección: Justin Lin.
Guion: Justin Lin, Daniel Casey.
Elenco: Vin Diesel, Michelle Rodríguez, Jordana Brewster, Tyrese Gibson, Ludacris, Nathalie Emmanuel, Charlize Theron, John Cena, Sung Kang, Helen Mirren, Kurt Russell.
País: Estados Unidos.
Más información de la película: https://www.imdb.com/title/tt5433138/
Hace 20 años, The Fast and the Furious (Rob Cohen, 2001) aterrizaba en la gran pantalla. Un thriller de acción que unía el lado callejero del motor con el policial y que, aún inocentes, no sabíamos en qué se iba a convertir. La evolución de la saga tuvo un punto de inflexión con la llegada de Justin Lin en Tokyo Drift (2006), la tercera entrega en donde comienza realmente la locura febril. Durante estos años hemos visto cómo han pasado de robar un camión en marcha a llegar al espacio en coche turbopropulsado, subiendo así la apuesta en cada película y ofreciendo una diversión sin pretensiones.
La novena entrega de la saga se sitúa un tiempo después de la octava. Dominic Toretto (Vin Diesel) vive con su hijo y con Letty (Michelle Rodríguez) en una casa aislada de la sociedad y echando de menos los rugidos de los motores. Un día, el deber llama a su casa, pues Mr. Nobody (Kurt Russell) ha desaparecido tras estrellarse su avión. Éste deja un mensaje para el equipo de Toretto, por lo que van a su búsqueda, encontrando heridas del pasado en la organización que provocó el accidente.
Rápidos y furiosos 9 se siente inconexa con el resto de la saga, ya que su estructura es similar al capítulo de una serie más que al de una película. En todas las entregas existe una trama que se desarrolla y se cierra, dejando alguna subtrama abierta para la siguiente; pero aquí, la aparente trama principal no tiene importancia en ningún momento. Más bien, se siente como una excusa para presentar personajes como Jakob Toretto (John Cena) de cara a la película final de la saga, como si simplemente estuvieran colocando las piezas de ajedrez sin empezar la partida.
Con una trama principal que no importa, las escenas de acción acaban causando confusión por muy espectaculares que estén rodadas. No busco historias elaboradas en este tipo de películas, sólo quiero divertirme y desconectarme de la realidad, pero esta entrega es demasiado vaga en todo ello. Mi problema es que no sabía lo que hacían los personajes, ni por qué luchaban, y para que una escena de acción tenga sentido, tienes que saber qué la ha causado y a dónde va.
Por muy vago que sea el guion, siempre hemos visto a la familia de Toretto luchar por algo que valía la pena, dándole sentido a las impresionantes escenas de acción. Aquí luchan por algo que no terminan de explicar, que se siente repetitivo y que hace que las escenas de acción estén sin motivo aparente.
Alejándonos de lo negativo del filme, el personaje de Roma (Tyrese Gibson) tiene una escena donde parece estar a punto de romper la cuarta pared, insinuando que son superhéroes y que si no lo fueran deberían estar muertos tras todas las locuras que han hecho. Y es que no podría describirlo de una forma mejor: son superhéroes sin poderes, pero con coches que rugen como mil leones. Aunque las escenas de acción se sientan sin sentido narrativo, son una auténtica locura. Una apuesta elevada que ya parece imposible de superar, pero que de seguro lo harán.
Las persecuciones, explosiones, robos y un largo etcétera de escenas de acción que desafían las leyes de la física son ya un sueño febril en la saga que parece no tener límites. ¿Quién va a creer a este grupo de tarados cuando cuenten sus hazañas? Únicamente los espectadores, que están ahí para ver brillar a esta singular familia. El cine hace posible lo imposible, y Rápidos y furiosos 9 está llena de imposibilidades delirantes y emocionantes.
Como amante de la saga, puedo decir que Rápidos y furiosos 9 se me ha quedado corta respecto a las cintas anteriores, pero que está bien que exista para terminar de presentar a los personajes principales, colocar a los villanos en un punto de ataque y comenzar la carrera final. Espero impaciente el regreso de Dominic Toretto y su familia para ver qué locura estelar logran en la siguiente y última entrega, la cual será dividida en dos partes. Mientras tanto, este noveno capítulo es un tentempié que sólo abre el apetito para lo que se viene. Un pequeño motor rugiendo antes de apretar el acelerador.

Jose Manuel Medina es un graduado en comunicación audiovisual que actualmente se dispone a estudiar dirección de fotografía mientras trabaja en el Festival de Cine Fantástico de Málaga (Fancine). Desde pequeño se considera un loco por Star Wars, y el cine de terror y fantasía. Lleva a John Carpenter en el corazón y siempre acaba hablando de él en cualquier conversación. Su sueño es vivir con un gatito al que cuidar mientras trabaja dentro del sector cinematográfico. Tiene una gran habilidad para llorar durante cualquier película que vea. Aunque le cuesta elegir sus cintas favoritas siempre acaba confesando que son El Viaje de Chihiro, The Thing y The Last Jedi.