Moonlit Winter: un drama coreano de amor y diversidad
En dónde la puedes ver: Netflix
Director: Lim Dae-hyung
Elenco: Kim Hee-ae, Nakamura Yûko, Kim So-hye.
País: Estados Unidos
Más información de la película: https://www.imdb.com/title/tt11311974/
Moonlit Winter (윤희 에게) es una película surcoreana dirigida por Lim Dae-hyung. Aunque poco conocido en Occidente, Dae-hyung tiene varios proyectos que bien vale la pena ver, incluyendo el corto The World of If (2014) y, su ópera prima, Merry Christmas Mr. Mo (2016), cinta multipremiada durante el Festival Internacional de Cine de Busan y el Icheon Chunsa Film Festival de Corea del Sur.
Su nuevo esfuerzo directoral, Moonlit Winter, es protagonizado por Kim Hee-ae y Kim So-hye, quienes interpretan a una madre (Yoon-hee) y a una hija (Sae Bom), respectivamente. La cinta narra la relación de Yoon-hee, una madre divorciada y con un empleo sin futuro, y Sae Bom, su hija adolescente que cada vez se siente más lejana de su familia, especialmente de su madre que se ha vuelto casi una autómata.
Todo cambia cuando Sae Bom abre por error una carta dirigida a su madre proveniente de Japón. La carta resulta ser de un viejo amor que nunca la olvidó. La historia se desenvuelve lentamente y pronto hija y madre emprenden un viaje a Japón del que, sin saberlo, no regresarán siendo las mismas. Aunque el viaje ocupa buena parte de la cinta, la película en realidad no es una road movie, más bien es una cinta de introspección y auto descubrimiento en donde el entorno es secundario.
Ya en Japón, aparecen nuevos personajes: una bella mujer llamada Jun (Nakamura Yuko) que vive amargada y solitaria, y su tía, Masako (Kino Hana), quien atiende un pequeño café. Las historias se van contando paralelamente hasta que chocan, mientras que una infinidad de confesiones, promesas y retos se gestan en el camino. El final es abierto, pero esperanzador.
Ciertas tomas recuerdan al Tercer Asesinato, sobrias y con un lente que muestra ambos países de manera distinta a lo que hemos percibido en cintas como Okja (2017) o Your Name (2016). Aquí, Corea del Sur y Japón están nevados, son solitarios y menos vibrantes. Una luminosidad opaca, sombría y triste está presente en todo momento.
La historia es interesante, y contiene un plot twist que la separa de un drama familiar ordinario. Aunque cae en lugares comunes, la cinta nos mantiene atentos. Además, nos hace reflexionar sobre lo importante que es aceptarnos y asumir las consecuencias de nuestras decisiones. De acuerdo con esta película, lo importante es liderar una vida basada en nuestras creencias y defenderlas, incluso de nuestra propia familia.
En cuanto a las características técnicas de la película, las tomas dejan mucho que desear. Salvo unas pocas, son rutinarias y aburridas, sin encuadre o magia. En ese sentido, la película está lejos de tener una fotografía destacable al contar con muchas tomas que se desperdician en una cotidianidad no destacable.
Respecto a las actuaciones, me parecen cumplidoras. Destacan las actuaciones de Kim Hee-ae y Nakamura Yuko, dos mujeres de mediana edad que muestran la importancia de contar con actrices talentosas de edad madura para interpretar este tipo de historias. Una lección que debería seguir Hollywood.
Moonlit Winter va construyendo personajes complejos a partir de premisas simples. Una historia, que, aunque similar a muchos dramas familiares coreanos, nos atrapa y ofrece un final más que satisfactorio.

Iván Paredes es economista, esposo, padre de familia y cinéfilo. Ha colaborado en múltiples blogs sobre pobreza, arqueología y su zona favorita de la ciudad de México, Tacubaya. Ha estado involucrado desde el inicio en Palomita de maíz, presentando sus opiniones sobre el estado del cine mexicano y la relación entre el cine y la economía. Fanático de las películas mexicanas e intentando ofrecer una mirada descubridora del cine latinoamericano, en sus planes futuros está grabar un corto. Entre sus cintas favoritas se encuentran Niños del Hombre (2006), Soylent Green (1973) y Macario (1960).