La familia Mitchell vs. las máquinas: la esperanza de la humanidad en manos de una familia inusual
Dirección: Michael Rianda.
Guion: Michael Rianda, Jeff Rowe.
Elenco vocal: Abbi Jacobson, Danny McBride, Eric Andre, Maya Rudolph, Olivia Colman, Michael Rianda, Doug the Pug, Charlyne Yi, Conan O’Brien, Chrissy Teigen, John Legend, Fred Armisen.
País: Estados Unidos.
Más información de la película: https://www.imdb.com/title/tt7979580/
Poco a poco la tecnología se ha convertido en el pilar de nuestras vidas, al grado que nos hemos vuelto tan dependientes de nuestros aparatos que ni siquiera nos damos cuenta cuando los estamos usando. La inteligencia artificial ha evolucionado tanto que la idea de su existencia ya no es algo que solo podría ocurrir en la ciencia ficción.”
¿Qué pasaría si un día nuestros asistentes digitales decidieran dejar de obedecernos, revelándose en contra nuestra? Este es el planteamiento que el guionista Mike Rianda (Gravity Falls) ha elegido para su ópera prima, La familia Mitchell vs. las máquinas.
Una de las inmensas ventajas que tiene la animación es la capacidad de plasmar las ideas más ambiciosas de nuestro subconsciente dentro un fotograma, y en esta cinta sus realizadores aprovecharon al máximo esos recursos para llenar la pantalla de referencias visuales al cine y a las propias emociones de los personajes. Este tipo de animación – que juega con la rotoscopia y los diseños en 3D – ya se había utilizado anteriormente en Spider-Man: Into the Spiderverse (2018), producida igualmente por Sony Pictures y que se convirtió en un fenómeno por su innovadora forma de contar una historia a través de distintos estilos de animación. La familia Mitchell vs. las máquinas retoma varios de estos conceptos visuales, pero no se limita en sus ambiciones y se reinventa constantemente a favor de su narrativa.
Katie Mitchell (Abbi Jacobson) es una chica que ha encontrado en el cine un refugio para explotar su creatividad y sobrevivir en un mundo en donde se siente incomprendida. La relación con su padre Rick (Danny McBride) es cada día más complicada y su único anhelo es irse a la universidad para ya no tener que lidiar con su peculiar familia.
Rick es un hombre peleado con la tecnología y que, en su intento de proteger a Katie, termina convirtiéndose en su mayor crítico. La madre Linda (Maya Rudolph) está ligeramente obsesionada con el concepto de la familia perfecta y su mayor aspiración es estar a la altura de sus vecinos, los Posey. Aaron (Michael Rianda), el hermano menor y cómplice de Katie en sus inicios como cineasta, es un niño extraño que tiene una obsesión inmensurable con los dinosaurios y el único en la familia que realmente comprende a su hermana.
Cuando por fin llega el día de partir a la universidad para Katie, la familia decide llevarla directamente para vivir una última aventura por carretera. Lo que en un inicio parece un viaje en carro inofensivo se transforma en la aventura de sus vidas cuando paralelamente una inteligencia artificial (Olivia Colman) se revela contra su creador y activa una revolución cibernética en todo el mundo. Mientras la humanidad cae en las trampas de los robots, los Mitchell se convierten en la única esperanza para detener este apocalipsis tecnológico.
La historia parte de un concepto que hemos visto miles de veces, pero su encanto radica en lo cercana que se siente la representación de la familia imperfecta en un contexto en donde la tecnología nos ha rebasado. Si bien es cierto que nunca nos hemos enfrentado a un apocalipsis tecnológico, la realidad es que nuestras relaciones humanas se han visto afectadas por el consumo excesivo de nuestros dispositivos móviles.
El director conoce bien al público al que quiere llegar con esta historia, ya que expone un problema tan real como lo es la adicción a la tecnología a través de una familia que inspira cercanía en el espectador. Aunque La familia Mitchell vs. las máquinas da un paso importante al presentar a la primera protagonista lesbiana en una película de animación para toda la familia, lo hace sin necesidad de recalcar su orientación sexual o convertirlo en una problemática para su dinámica con otros personajes.
A pesar de que la película no cuenta con un elenco mundialmente conocido, es evidente que los Mitchells se desarrollaron con sus actores en mente. Es brillante la elección de los intérpretes por las características que han definido sus carreras, desde Abbi Jacobson que ha utilizado sus ideales feministas y personalidad queer para desarrollar su humor en series como Broad City, hasta una divertidísima Olivia Colman que en su papel de inteligencia artificial recuerda esa personalidad excéntrica que le valió el Oscar por The Favourite (2018).
Gracias a su extraordinario humor plagado de referencias a la cultura pop, desde los temibles Furbys hasta los videos jocosos de animales que inundaron internet hace unos años, La familia Mitchell vs. las máquinas es una buena opción para ver con toda la familia. Es una experiencia tan encantadora como divertida, así como inspiradora, pues puede ayudar a algunos padres a reflexionar sobre la relación que tienen con sus hijas.

Estudiante de cine que dedica todos los días de su vida a ver por lo menos una película o un capítulo de alguna serie. Desde pequeño descubrió las películas porque le gustaba ver los pósteres de la cartelera que aparecía en el periódico de espectáculos. Ver El Señor de los Anillos con sus hermanas cambió por completo su vida. Sus conocidos lo consideran una Wikipedia andante del cine y, si lo descuidas, planeará maratonear alguna filmografía que no haya visto. Su época favorita del año es la temporada de premios y para poder dormir cuenta en su mente a todas las ganadoras del Óscar que recuerda. Es un amante de las coming-of-age y de las luchas de la WWE.