High Life: una odisea frustrante y conmovedora sobre la mezquindad humana
Disponible en:
Directora: Claire Denis
Elenco: Robert Pattinson, Juliette Binoche, André Benjamin, Mia Goth, Agata Buzek, Lars Eidinger, Claire Tran, Scarlett Lindsey, Jessie Ross.
Países: Reino Unido, Francia, Alemania, Polonia, Estados Unidos
Duración: 1 hr 53 min.
Más información de la película: https://www.imdb.com/title/tt4827558/
Con las noticias de que Robert Pattinson fue seleccionado para ser el siguiente Batman, las críticas no se hicieron esperar, en especial debido a su participación en Twilight, saga que personalmente aborrezco. Sin embargo, vale la pena recordar el increíble repertorio que ha creado en los últimos ocho años, siendo High Life – o Good Times – quizá lo mejor de su carrera hasta el momento (la próxima a estrenarse The Lighthouse trae consigo rumores de Premios Óscar…).
Pattinson ha demostrado continuamente que tiene gusto y talento, además de que cuenta con un je ne sais quoi que hace que los grandes autores del cine contemporáneo quieran trabajar con él. Como ejemplo perfecto tenemos a Claire Denis (Beau Travail [1999], Nenette et Boni [1996] y Chocolat [1988]), una de las directoras más aclamadas del cine, quien por fin dio el gran salto del cine francés al inglés con High Life y eligió a Pattinson para el rol principal.
High Life inicia con Monte (Pattinson) y una bebé (Scarlett Lindsey) en una nave espacial, viviendo una existencia cotidiana y adorable gracias a la ternura de la niña y la paciencia del adulto. Conforme transcurre la película, aprendemos que Monte era parte de una flotilla de criminales condenados a prisión de por vida que fueron enviados a explorar un agujero negro y de esta forma quizá conquistar avances científicos en su misión aparentemente suicida.
A pesar de contar con rasgos de ciencia ficción, la misma Denis no considera que su película pertenezca a ese género, pues se enfoca más en el drama entre los personajes que en la misión en sí. Para aquellos que quieran ver una tragedia intensa y existencial sobre la condición humana, ésta es su película. Simplemente sucede que el escenario es una nave que ofrece la imposibilidad de escape. Eso sí, vale la pena destacar que los pocos momentos que se presentan del agujero negro y del espacio son hermosos y espectaculares que recuerdan a lo visto en Interestellar.
Digerir High Life resulta complicado y exige tiempo para reflexionar e intentar comprender las decisiones de Denis. A lo largo de la historia se presentan momentos crudos de muertes, sexo, violaciones, peleas, violencia de género y completa hostilidad entre los personajes, los cuales se podrían relacionar con los antecedentes criminales de la flotilla, o en realidad, con la misma condición humana. Decir que comprendí toda la película mientras la veía sería una exageración. Más bien me exigió tiempo y reflexión para tener una apreciación tardía que posteriormente se convirtió en reverencia.
Dentro de los momentos turbios y oscuros que se presentan, que para mi gusto en ocasiones resultan innecesariamente impetuosos, la relación que se desarrolla entre Monte y la niña son la parte emotiva de la cinta, y más al considerar los antecedentes de él y sus vivencias en la nave antes de la llegada de la criatura. Scarlett Lindsey, la (nueva) actriz de sólo 14 meses de edad, es la cosa más adorable del mundo y las escenas que Pattinson improvisa con ella son apreciables y tiernas.
Por su parte, Pattinson es la estrella de la película. Ofrece una actuación suave, apagada y depresiva que bien van con la personalidad que ha mostrado a lo largo de los años en frente de cámaras. En esta película, estas características son vitales y valoradas. Por su parte, el elenco secundario liderado por Juliette Binoche y Mia Goth es destacable y esencial. Es evidente que Denis les exige mucho, y ellos responden justificar con valentía y entrega.
High Life presenta un estudio complejo sobre la condición humana, enfocándose tanto en los vínculos preciosos y valiosos, como en las partes oscuras y negativas que nos hacen humanos. Denis se da a la tarea de presentar la complejidad de las personalidades humanas y de la coexistencia social, y de cómo las relaciones que formamos, sin importar las circunstancias, pueden resultar en nuestra perdición o salvación. Esto ocasiona que algunas escenas se sientan de más o demasiado expuestas como para apreciarlas.
En general la película resulta ser un gran acierto, cimentada por la tenue interpretación de Pattinson. No se sorprendan si la película sigue en sus cabezas mucho tiempo después de haber dejado la sala de cine.
Originaria de la Ciudad de México, Alessandra considera al cine como su gran amor. Fanática empedernida de Paul Newman y La Momia (1999), y dueña de una facilidad envidiable para aprenderse diálogos innecesarios para la vida real, en 2017 fundó Palomita de maíz. Aquí escribe constantemente sobre cine y televisión. También pueden encontrar sus palabras en sitios como InSession Film, Filmotomy, Cherry Picks y Screen Queens.