Cordero: un cuento sobre la familia
Disponible en: cines.
Dirección: Valdimar Jóhannsson.
Guion: Valdimar Jóhannsson y Sjón.
Elenco: Noomi Rapace, Hilmir Snær Guðnason, Björn Hlynur Haraldsson.
Países: Islandia, Suecia, Polonia.
Palomómetro:
Más información de la película: https://www.imdb.com/title/tt9812474/
Un dato curioso de Islandia es que su mayor número de población no es la de seres humanos; más bien, la isla cuenta con casi el triple de población de ovejas. En Cordero, Valdimar Jóhannsson toma una característica típica islandesa para crear su historia de terror.
Cordero presenta a una pareja de granjeros, María (Noomi Rapace) e Ingvar (Hilmir Snær Guðnaso). Cuando una de sus ovejas da a luz a su cría, ellos la reciben como si fuera su propia hija y un obsequio de la naturaleza, consiguiendo la felicidad que tanto esperaban. Sin embargo, a partir de la llegada de Petur (Björn Hlynur Haraldsson), hermano de Ingvar, su tranquilidad desaparece cuando ve y juzga a la criatura que han estado criando como hija.
Como si fuera un cuento oral que suelen contar los abuelos, Jóhannsson narra su historia de terror. Toma características únicas de su país para explorar las relaciones de familia y cómo lo que tanto desean los padres – en este caso un hijo –, puede brindarles la estabilidad que tanto desean. Sin embargo, Jóhannsson presenta que este lazo creado por una tercera parte es un tanto artificial y débil, llevando a la inestabilidad.
Los planos largos, las escenas de la naturaleza islandesa y los animales que viven en la granja son elementos que abundan en la película. Estos detalles minimalistas refuerzan la construcción de la historia y provocan la sensación de que hay algo inminente que está por suceder. La tensión se crea de forma que el final es una especie de catarsis y el descubrimiento de que cualquier deuda hacia la naturaleza puede cargar con una grave consecuencia.
El desenlace de la película es una analogía obvia sobre los dioses y la convivencia con el ser humano, y cómo ellos pueden convivir en el mundo sin consecuencias. Me parece oportuno recalcar la analogía bíblica sobre el significado del cordero y cómo aquí su revisión parecer contraria. En la Biblia, el cordero se sacrifica para limpiar el pecado humano. Aquí se toma más bien como un regalo a la familia para darle paz. Es una ofrenda para enmendar los sucesos de su pasado.
Ésta es la ópera prima de Valdimar Jóhannsson, aunque su control y certeza hacen que no se sienta como tal. A pesar de que utiliza un elemento tan característico y especial de Islandia, Jóhannsson habla sobre temas universales como la familia y la aceptación de las diferencias. Esta universalidad hace que valga la pena mirar y descubrir su mundo.