Ammonite: Kate Winslet y Saoirse Ronan no salvan romance insípido
Disponible en: Video por demanda.
Director y guionista: Francis Lee.
Elenco: Kate Winslet, Saoirse Ronan, Alec Secareanu, Fiona Shaw, Gemma Jones.
Países: Reino Unido, Estados Unidos, Australia.
Palomómetro: 
Más información de la película: https://www.imdb.com/title/tt7983894/
Con God’s Own Country (2017), una de las películas más románticas de los últimos años, Francis Lee ganó el amor de críticos y fanáticos del cine independiente. Tres años después, Lee está de regreso con Ammonite, película que comparte características con su esfuerzo directoral anterior, pero con resultados alejados de la calidad previa.
Lee toma la historia de Mary Anning (Kate Winslet), persona real y respetada (después de su muerte) en el mundo de la paleontología para introducir una historia lésbica en un mundo en el que las mujeres son ignoradas. Para enriquecer su vida solitaria, Lee establece una ficción romantizada de lo que pudo haber pasado en su historia privada.
De esta forma, seguimos a la mujer casi ermitaña que pasa sus días trabajando sola en las playas de Dorset, Reino Unido, en el siglo XIX. Su rutina prácticamente consiste en ir a buscar fósiles a la playa, limpiarlos y exhibirlos para su venta. Su género y estilo de vida la han alejado de los vítores que su carrera en la antropología merece, pero parece estar en paz con estas circunstancias, o al menos tolerante.
Un día, un aprendiz de antropólogo y su esposa llegan de manera inesperada en busca de la asesoría de Anning. Justo antes de irse, el hombre le pide a Mary que deje que su esposa Charlotte (Saoirse Ronan) la acompañe todos los días a la playa con la espera de que salga de su depresión. Así, Mary y Charlotte comienzan a desarrollar un vínculo especial, primero por obligación, pero luego por interés.
La película ha recibido múltiples y entendibles comparaciones con la adorada Retrato de la mujer en llamas, no obstante, fuera del hecho de que ambas películas se enfocan en una historia de amor lésbico de época, no comparten mucho en cuanto a calidad o ejecución. Vale la pena destacar el contraste en el ojo creativo de la película, pues mientras que la película francesa contó con la dirección y guion de una mujer lesbiana, Céline Sciamma, Ammonite fue escrita y dirigida por Francis Lee, un hombre homosexual. ¿Acaso el ojo de un hombre es el mejor para contar esta historia? Precisamente el dudoso desarrollo de la relación entre las mujeres y las escenas gráficas se acercan a la negativa en esta pregunta.
Más bien, Ammonite comparte características con God’s Own Country, incluyendo el ritmo de la historia, el silencio ensordecedor en la película y las escenas pasionales entre las enamoradas. Aun así, mientras que en la cinta de 2017 Lee ofreció una historia profunda y conmovedora, en esta cinta ofrece algo frío e incómodo.
La rendición física y la confianza absoluta en la dirección de Lee son admirables por parte de las actrices, con especial énfasis en Winslet, pero, más allá de esto, falta algo que ofrezca calidez o que inspire devoción a la nueva pareja. Más bien todo se siente a media tinta dañada por la falta de química entre Winslet y Ronan.
Lee se recarga mucho, de manera insatisfactoria, en sentimientos escondidos o pensamientos no mostrados para impulsar la relación entre Mary y Charlotte, más bien nos sumerge bruscamente en su relación. Puede que sea la interpretación impasible de Winslet o la personificación muy angelical de Ronan, pero el romance es soso y poco interesante.
Al considerar que la historia es resultado de la imaginación de Lee, es imposible cuestionar algunas de las libertades creativas del director. Por ejemplo, ¿cuál es la necesidad de presentar una historia con una división de edad tan evidente como ésta (Saoirse Ronan tiene 26 años, Kate Winslet tiene 45) sin justificación alguna?
En ocasiones, Ammonite coquetea con temas más interesantes que la relación inesperada entre las protagonistas, incluyendo, el papel de la antropóloga en la comunidad especializada que la rechaza por su género, o las posibles presiones de la sociedad ante esta relación cuestionable tanto en posicionamiento social, edad y, por supuesto, sexo. Estos puntos son tocados breve y arbitrariamente sin ofrecer comentario significativo o desafío adicional. Lee se enfoca casi exclusivamente en su historia sosa de amor.
Mientras que Ammonite es visualmente memorable por la fotografía de Stéphane Fontaine, la historia de amor entre dos mujeres solitarias se siente fría e insensible. El ritmo de la película es tan lento que desafía la paciencia de la audiencia. La relación entre las protagonistas es inesperada y superficial. En esta ocasión, más bien es recomendable revisar la joya cinematográfica anterior de Lee, God’s Own Country.
Originaria de la Ciudad de México, Alessandra considera al cine como su gran amor. Fanática empedernida de Paul Newman y La Momia (1999), y dueña de una facilidad envidiable para aprenderse diálogos innecesarios para la vida real, en 2017 fundó Palomita de maíz. Aquí escribe constantemente sobre cine y televisión. También pueden encontrar sus palabras en sitios como InSession Film, Filmotomy, Cherry Picks y Screen Queens.