Rey legítimo: la historia del verdadero “corazón valiente”
Disponible en:
Director: David Mackenzie
Elenco: Chris Pine, Aaron Taylor-Johnson, Florence Pugh, Stephen Dillane, Billy Howle, Sam Spruell, James Cosmo, Tony Curran, Steven Cree, Duncan Lacroix.
País: Reino Unido, Estados Unidos
Duración: 121 min.
Más información de la película: https://www.imdb.com/title/tt6679794/
Me temo decepcionar a muchos, en especial a la fanática número uno (mi mamá), pero una gran cantidad de los hechos que se presentaron en el ¿clásico? Corazón valiente (1995) no son verdad. Las licencias creativas que se tomó Mel Gibson para volver más dramática y emotiva la película ya son legendarias. Entre estas imprecisiones históricas se encuentra el daño que le hizo a Robert the Bruce (por cierto, es a quien se le conoce como Corazón valiente en Escocia), quien en realidad es un héroe nacional. Para resarcir este daño, y contar la historia verdadera de este personaje histórico, David Mackenzie (Hell or High Water, Starred Up) presenta la nueva película de Netflix, Rey legítimo.
Mackenzie empieza la película con un bang al presentar un momento derrotista en la lucha por la independencia escocesa: casi todos los condes de Escocia han prometido la renuncia a la pelea y su lealtad al Rey Eduardo de Inglaterra (el único que mantiene la pelea es William Wallace). A través de una toma travelín (en la que la cámara sigue al personaje) de nueve minutos (¡!), se nos exponen los juegos del poder, las lealtades y enemistades, así como las circunstancias iniciales de este armisticio obligado. El personaje principal es Robert Bruce (Chris Pine), el segundo al mando del condado de Carrick, y quien, por cierto, tiene muy buenos argumentos para exigir el trono escocés.
Después de algún tiempo, en el que los eventos que destacan son su boda arreglada con la inglesa Elizabeth Burgh (Florence Pugh) y la muerte de su padre, su pasividad se pierde con el asesinato terrorífico de William Wallace por parte de los ingleses. Bruce decide regresar a la pelea e intentar unir a los condes escoceses bajo su mandato y luchar por la independencia.
La primera característica destacable de la película es que Mackenzie hizo una versión apegada a los hechos. Aparentemente este proyecto era muy personal para él, en el que llevaba años trabajando, por lo que se aprecia la exactitud que le invirtió a la historia y la manera en que explotó los hechos reales históricos a su favor (y en detrimento de los ingleses). De igual forma, destacan las múltiples escenas de batalla, las cuales son muy gráficas y sangrientas. Se admira que no haya huido de la violencia cruel y cruda, llena de sangre y momentos muy desagradables. De hecho, una escena particularmente horrible me dejó intranquila por un par de días. A pesar de lo fuerte de algunas escenas, la crudeza presentada es un acierto, al situar al espectador en medio de los hechos y crear una empatía e involucramiento por los héroes de la película.
Además de Bruce, se presentan dos personajes dignos de atención. Honestamente el resto del elenco es intercambiable y borroso; por ejemplo, nunca distinguí a los dos hermanos de Bruce del montón de guerreros. En primer lugar, está Elizabeth Burgh, la segunda esposa de Bruce. Pugh es toda una promesa del futuro. Con tan sólo 22 años, esta actriz ya cuenta con un CV impresionante, y todo a partir de su actuación revelatoria en Lady Macbeth (2016). Como Elizabeth, Pugh maneja una compostura y dominación de carácter que le permiten desarrollar una buena interacción con Chris Pine. Asimismo, está consciente de las realidades de su vida, entre las que destacan un matrimonio arreglado, volverse la madrastra de una pequeña niña, y ser la nueva reina de Escocia a través de la guerra. Su firmeza ante la presión y la lealtad que exhibe por su nuevo esposo son inspiradores y ejemplares.
En segundo lugar, está el guerrero James Douglas (Aaron Taylor-Johnson), quien llega de la nada y se convierte en la mano derecha de Bruce. A pesar de que el proceso de integración entre los dos personajes se realiza de manera muy rápida para permitir que la película avance, sí queda clara la relación fuerte entre ambos. Por su parte, Taylor-Johnson da una buena actuación al presentar un personaje lleno de contrastes: salvaje y violento con los enemigos, pero leal y dócil con Bruce. De hecho, como dato curioso más allá de la película, pero que a la vez refleja la relación entre ambos personajes, cuando Bruce murió en 1329, Douglas guardó su corazón en féretro y emprendió una misión para llevarlo a Tierra Santa. De ahí el apodo de Corazón Valiente para Bruce.
En cuanto al mismísimo Bruce no hay mucho que decir que no se haya dicho antes respecto a Chris Pine. Colaborando por segunda ocasión con Mackenzie, Pine presenta una buena actuación, la cual se pudo ver amenazada por el uso del famosamente difícil acento escocés. En mi limitada experiencia, éste lo realizó bien (perdonen si algún experto termina ofendido), por lo que esa línea de fuego se evitó sin contratiempos.
Lo destacable es que Pine es un Robert the Bruce muy humano. De acuerdo con esta representación, más allá de ser un increíble guerrero y estratega, Bruce era una muy buena persona, lo cual se presenta a través de pequeños detalles en la vida diaria tanto con su familia como con su gente. Su efectividad en el campo de batalla y el realismo en su política, contrastan con su actitud en la vida diaria. Un poco más de bondad y el personaje habría caído en una línea peligrosa de aburrimiento, pues hubiera parecido un santo.
Por último, vale la pena destacar la batalla final de la película. Prácticamente son diez minutos de sangre, violencia y sufrimiento extremo que refleja la razón de ser de la leyenda de Bruce, y la manera en que este personaje le dio la vuelta a las circunstancias, logró unificar al pueblo, y después de muchas peleas, obtener la independencia de Escocia.
A pesar de que la película dura dos horas, en algunas ocasiones la sentí apresurada. Tuve la percepción de que Mackenzie tuvo que dejar mucho de lado, así como saltarse varios años e interacciones, para poder contar su historia. No obstante, estas decisiones no se sienten torpes o forzadas; más bien exigen que el espectador ate varios cabos y se quede con ganas de más.
Legítimo rey es una película que hace su labor de presentar efectivamente la vida de un héroe nacional como lo fue Robert the Bruce para Escocia. A través de las escenas gore de pelea, así como de buenas actuaciones, podemos viajar al pasado y, en verdad, aprender un poco de historia en el proceso. Si la cinta logra cumplir con su cometido, sembrará la semilla de la curiosidad para aprender mucho más sobre este mítico personaje y arreglar ese conocimiento cinemático de historia que teníamos cruzado.
Originaria de la Ciudad de México, Alessandra considera al cine como su gran amor. Fanática empedernida de Paul Newman y La Momia (1999), y dueña de una facilidad envidiable para aprenderse diálogos innecesarios para la vida real, en 2017 fundó Palomita de maíz. Aquí escribe constantemente sobre cine y televisión. También pueden encontrar sus palabras en sitios como InSession Film, Filmotomy, Cherry Picks y Screen Queens.
No vi la manita del like, no me decepciona saber la verdad mi amor es mejor saber que Robert the Bruce fue en realidad corazón valiente, tanto Robert como William son personajes históricamente importantes. Me encanto la reseña.