Shiki Oriori, sabores de la juventud : cuentos chinos modernos
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Directoras: Li Haoling, Jiaoshou Yi Xiaoxing y Yoshitaka Takeuchi.
Elenco: Taito Ban, Dorothy Fahn, Matt Fowler, Crispin Freeman, Ikumi Hasegawa
País: China, Japon
Duración: 75 min.
Palomómetro: 
Más información de la película: https://www.imdb.com/title/tt8176578/
Shiki Oriori, sabores de la juventud : cuentos chinos modernos
Shiki Oriori: Sabores de la juventud es un anime que narra la vida de tres jóvenes en China, incluyendo sus problemas, inquietudes, miedos y alegrías. En tan solo una hora y cuarto, se presentan las historias, aparentemente no relacionadas: Los noodles de arroz, Un pequeño show de moda y Amor en Shanghái, dirigidos por Li Haoling, Jiaoshou Yi Xiaoxing y Yoshitaka Takeuchi, respectivamente. Inicialmente, uno pensaría que el hilo conductor de la cinta es la comida, pero no, más bien es la juventud, aunque no es claro.
Los noodles de arroz nos habla de un muchacho nostálgico (Taito Ban) que recuerda su pasado rural en la China Continental, envuelto en un entorno evolutivo. El reflejo histórico de los cambios en la sociedad china queda estampado en esta historia. La verdad es que, para mi gusto, esta historia es la mejor. Su trama esta menos enfocada en un problema, y más en la cotidianidad de la vida, lo que nos permite inmiscuirnos más con los personajes. Además, visualmente, los cuadros y enfoques son sobresalientes. La abuela sirviendo la sopa es una cosa extraordinaria.
Un pequeño show de moda narra la historia de dos hermanas, una de ellas es modelo reconocida (Minako Kotobuki) y la otra una aprendiz de modista (Haruka Shiraishi). El mensaje de la historia es claro, tan claro que lo repiten constantemente en pantalla: hoy estas en la cima, pero mañana quizás no. La trama ya se ha visto antes y de toda manera posible (Rocky, The Longest Yard, etc.) en una larga lista de cintas en donde el protagonista se tiene que levantar de sus cenizas y volver a la gloria. La premisa aburre o en todo caso es predecible. La relación entre las hermanas pasa a un segundo plano, cuando debería ser lo principal, y de hecho, la menor (la modista) apenas aparece. Otra queja de esta historia es que, sí bien muestra el mundo ultra competitivo del modelaje, lo hace de modo tan superficial que simplemente no comunica nada, y además al tener un desenlace “feliz”, pareciera que el motto del corto es falso. Más bien quedaría: hoy estas en la cima, y así para siempre.
Amor en Shanghái muestra las consecuencias de un malentendido juvenil que separa a dos chicos en su etapa del primer amor. Lejos de sentir empatía o recordar mi propia adolescencia, esta historia me desespera. Los malentendidos no son buenos para construir con ellos toda la trama de un cuento. Así pues, lejos de dar un cierre adecuado esta historia me deja un tanto insatisfecho. A diferencia de la primera historia, ésta no es un reflejo de nada. Una historia de amor inconcluso que pudo suceder en cualquier lugar y con cualquier pretexto.
Al final, las historias no encajan, incluso con la escena de post créditos, las historias siguen sin encajan. No se siente como un compendio coherente de historias, sino más bien un pretexto para reunir a tres exitosos directores chinos. No obstante, debo decir que visualmente, Sabores de la Juventud es, al igual que Your name, una obra maestra. Los paisajes urbanos son delicados y recrean con muy buena precisión muchos detalles locales. Así, los personajes se vuelven más fondo que protagonistas. Las vistas áreas de Shanghái, los pisos desgastados de los edificios, los detalles de los platos y la preparación de los platillos son increíbles para la vista.
Iván Paredes es economista, esposo, padre de familia y cinéfilo. Ha colaborado en múltiples blogs sobre pobreza, arqueología y su zona favorita de la ciudad de México, Tacubaya. Ha estado involucrado desde el inicio en Palomita de maíz, presentando sus opiniones sobre el estado del cine mexicano y la relación entre el cine y la economía. Fanático de las películas mexicanas e intentando ofrecer una mirada descubridora del cine latinoamericano, en sus planes futuros está grabar un corto. Entre sus cintas favoritas se encuentran Niños del Hombre (2006), Soylent Green (1973) y Macario (1960).